Tuesday, October 30, 2012

150 años de Debussy: Peleas y Melisande




Después de la extraña "pérdida" de la ópera Rodrigo & Jimena, CD 80, Debussy escribiría su segunda ópera Peleas y Melisande, CD 93, considerada por mucha gente como su única ópera. 

La ópera se basa en la obra de teatro del mismo nombre, escrita por el dramaturgo belga Maurice Maeterlinck, quien sería honrado con el premio Nobel de Literatura en 1911 y coincidentemente sería de la misma edad que Debussy, siendo el compositor mayor por 7 días. 

La obra de teatro pasó sin pena ni gloria en 1893. En un principio, Debussy le solicitó a Maeterlinck la obra de teatro La princesa Malena, de 1889, para escribir una ópera. Sin embargo, cuando conoció Peleas y Melisande, optó por ésta, ante la aceptación del dramaturgo. 

Es interesante que el libreto fue escrito entre Maeterlinck y Debussy; a medida que fue avanzando su creación desde 1893 hasta la puesta en escena el 30ABR02, las discrepancias entre el autor y el compositor fueron en tal aumento (además de ser públicas) que la obra se estrenó en un mar de éxito, morbo y controversia; tan grande fue el desorden dentro del mismo teatro, que la policía francesa tuvo que intervenir. En la segunda escena del acto II, Melisande le dice a su marido, Gouland, que no es feliz, siendo tanto el descontrol que el público le contestó a coro: ¡nosotros tampoco! Debussy estaba furioso, por lo que no salió de una de las oficinas del teatro en toda la noche, permaneciendo solo y sin recibir a nadie (en especial, a la prensa). 

A diferencia de la obra de teatro, la ópera presentada 9 años después fue muy exitosa. Contando con comentarios a favor y adversos (en particular, de Camillé Saint-Saëns) que avivaron aún más la controversia y el éxito popular. Los principales compositores alemanes de la época como Richard Strauss y Gustav Mahler también fueron contrarios a la obra: “esto no continene ningún elemento para llamarlo música”, dijo Strauss… “esta música no lastimará más mis oídos”, mencionó Mahler al salir del teatro. 

Musicalmente, es una obra sumamente interesante, donde la parte orquestal corre diferente a las voces de los cantantes. Como ocurre en la música impresionista, se muestran temas independientes entre sí que sugieren diferentes atmósferas, claro-obscuros que se sobreponen, siendo Fa sostenido mayor y Do mayor para cada caso. 

Con excepción de los momentos fuertes del acto IV, las voces de los cantantes no se superponen para crear armonías de duetos, tríos o cuartetos, como pasa en la mayoría de las óperas, un detalle muy interesante en la considerada como única ópera de Debussy. 

La insistencia de las dos arpas es muy clara en toda la ópera, mostrando cortinas de manera continua en su interpretación oscilante. 

Es interesante también que siendo una ópera, el papel protagónico lo lleva la orquesta en su interpretación, casi sin tomar en cuenta a los cantantes. 

La ópera se divide en 5 actos, situándose en un reino imaginario llamado Allemonde en el medievo. La trama se basa en la tragedia entre Paolo Malatesta y Francesca di Rimini, quien estaba casada con el hermano de Paolo, referenciados en La Divina Comedia de Dante Alighieri. 

El primer acto se desarrolla en tres escenas:
1.      En el bosque. Mientras está cazando jabalíes, Gouland (nieto del rey Arkel), conoce a Melisande, a la orilla de un río, de quien se enamora y se casa inmediatamente. Melisande estaba “custodiando” una corona que le prohíbe sacar del agua a Gouland.
2.      En una sala del castillo. Geneviéve, madre de Golaud, le pide autorización a Arkel para que su hijo regrese al castillo, ya que se ha casado con Melisande. Por otro lado, Peleas, hermanastro de Golaud, le pide permiso a Arkel para ver a un amigo que está a punto de morir (a pesar de que su padre está en las mismas condiciones).
3.      En el castillo. Geneviève y Melisande pasean junto al mar (en los jardines del castillo), uniéndoseles Peleas. Geneviève los deja solos; al poco tiempo, Peleas le comenta a Melisande de su partida, por lo que ella le muestra su desencanto. 

El segundo acto se desarrolla también en tres escenas:
1.      En una fuente del parque. Peleas y Melisande llegan a la fuente de los ciegos. Melisande juga con su anillo de bodas y al dar las doce campanadas de mediodía pierde el anillo en la fuente.
2.      En una habitación del castillo. Como coincidencia, justo al mediodía Gouland cayó de su caballo mientras estaba cazando. Al llegar Melisande al castillo, ve a Golaud herido en la cama y le dice que no está feliz en el castillo. Golaud se da cuenta de que no lleva el anillo y Melisande le comenta que lo perdió en una gruta cerca del mar. Golaud le pide que vaya con Peleas a buscarlo.
3.      En una gruta. A pesar de que Peleas y Melisande saben que no está en la gruta el anillo, se introducen en la misma por si acaso Golaud pregunta. Al subir la marea, ambos se regresan llenos de angustia. 

El tercer acto es el más largo de la ópera, teniendo cuatro escenas:
1.      En una torre del castillo. Peleas se va a despedir de Melisande, pero su larga cabellera le incomoda, por lo que la amarra a un árbol. Golaud llega en el momento del amarre, por lo que se quiere engañar a sí mismo, calificando de juego lo que está viendo.
2.      En el sótano. Golaud se marcha con Peleas, asomándolo al acantilado, pero sosteniéndolo de la mano para que no se caiga.
3.      En una terraza. Ahora es Peleas quien se engaña al no querer darse cuenta del mensaje dado por Golaud, por lo que éste se lo dice abiertamente: “debe alejarse de Melisande”… va a ser madre y necesita estar tranquila.
4.      En el castillo. Golaud le pide a Yniold (hijo de Golaud) que le cuente lo que sabe de la relación entre su hermanastro y su mujer. El niño se asoma por la ventana y le comenta a su padre que ambos están en el cuarto de Melisande, mirando la luz. 

El cuarto acto es el más intenso de la ópera (tanto por la trama como por la música), constando de dos escenas:
1.      En un pasillo del castillo. Peleas le pide a Melisande en la fuente de los ciegos esa misma noche, para despedirse. Se retira Peleas y llega Arkel a la habitación de Melisande. Llega Golaud y toma a Melisande del cabello, maltratándola frente a Arkel.
2.      En la fuente. Se encuentran Peleas y Melisande, ambos se declaran su amor y se besan, aparece Golaud y mata a Peleas… hieriendo a Melisande. 

El quinto y último acto es de una sola escena:
1.      En una habitación del castillo. Melisande acaba de dar a luz a una niña, y se encuentra convaleciente. Golaud le pide a Arkel y al médico que los dejen solos, nuevamente le pregunta sobre sus amoríos con Peleas, a lo que ella se declara inocente. Melisande muere y entran Arkel, el médico y los sirvientes. Finalmente, Arkel ordena a los sirvientes que saquen del cuarto a la bebé. 

A pesar de no ser una ópera muy popular fuera de Francia, ha permanecido dentro de las 100 óperas más representadas de todos los tiempos con 66 representaciones hasta este momento, ocupando el lugar 75 a nivel mundial y 9 en Francia. 

Se han realizado veintisiete registros de esta ópera, dentro de los cuales son de referencia para toda puesta en escena las versiones de Roger Désormière (1942), Ernest Ansermet (1952 & 1964), André Cluytens (1955 & 1956), Lorin Maazel (1969), Pierre Boulez (1970), Rafael Kubelik (1971), Herbert von Karajan (1954 & 1978), Charles Dutoit (1990), Claudio Abbado (1986 & 1991) & Bernard Haitink (2000). 

Existen además 6 grabaciones de video, destacándose dos de John Eliot Gardiner (1986 & 2010) y obviamente una de Pierre Boulez (1992). 

Un dato interesante es que esta ópera es la única obra de Debussy que aún conserva los derechos de autor, ya que Maeterlinck falleció en 1949… la ópera pasara a dominio público hasta 2019, al igual que el resto de la obra de Debussy. 

Saludos.


Wednesday, October 24, 2012

150 años de Debussy: Preludio al atardecer de un fauno




El 22 de diciembre de 1894 ocurrió un parte aguas en la música: Claude Debussy presenta su primer súper éxito, el poema sinfónico Preludio al atardecer de un fauno, CD 87. 

Esta obra catapultó a Debussy a la fama internacional y a la inmortalidad. Casi 100 años antes, Beethoven había hecho lo propio con la música romántica; ahora, Debussy no sólo contribuía a la consolidación de la música impresionista, sino que marcaba la pauta para la nueva composición del siglo XX… más allá de los tintes nacionalistas que inundaban la época de sus contemporáneos. 

La obra toma el texto del gran poema El atardecer de un fauno, de Stéphane Mallarmé, narrando el triste final de un fauno en el ocaso de su vida. La música dibuja perfectamente el avance de la égloga. El gran conductor y compositor francés Pierre Boulez, uno de los principales difusores de la obra de Debussy, mencionó alguna vez que la flauta de pan (fauno) trajo un nuevo aliento al arte de componer música, siendo el despertar para la música moderna. 

El propio Debussy aseguró que su Preludio no busca ser una síntesis del poema, sino una libre ilustración del mismo, donde el fauno se ve preso de deseos y sueños en su “atardecer”, pero cansado de perseguir ninfas y náyades, cae finalmente como víctima de la “noche”, donde obtiene su sueño de posesión. 

Debussy tenía la intención de componer una Suite con este poema, constituida por:

1.      Preludio
2.      Interludio
3.      Frase final 

Sin embargo, muchos consideran que fue tal el éxito y belleza del Preludio, que ya no prosiguió con su intención inicial. Por otro lado, otros consideramos que el Preludio contiene todo el carácter erótico que necesita el poema, siendo la razón por la cual el compositor dejó a un lado su primera intención. 

La obra inicia con un solo de flauta que simula la flauta de pan (kena, sampoña o siringa –en honor a la náyade Siringa, convertida en cañaveral y mencionada en el poema de Mallarmé), la cual desciende de manera cromática en tres escalas, para ascender nuevamente, como si se tratara de la flauta característica del fauno. 

Posteriormente, a la flauta lo arropan otras tres flautas, dos cornos ingleses, dos oboes, dos clarinetes, dos fagots, cuatro cornos, dos arpas y todas las cuerdas, quienes mantienen el tema (en particular las maderas), mientras la flauta solista simula al propio fauno. La inclusión de crótalos en las percusiones es una aportación interesante que hace Debussy. 

Lo que aparentemente es un caos entre los instrumentos, realmente representa pequeñas células, temas que se desarrollan en diferente métrica: 6/8, 9/8 & 12/8; los cuales empatan para lograr la armonía del poema sinfónico, es una auténtica genialidad… no sólo se muestra una insinuación atonal, algo que sería común unos cuantos años después, sino que la métrica presenta una libertad inusitada. 

Debussy estaba en la plenitud de sus facultades y listo para saltar a la fama, por lo que es interesante observar que tomara un tema de frustración ante una vida que le sonreía de la mejor manera, ya que fue un digno representante de los intelectuales de la época, con noches intensas de bohemia y placeres. Hace un par de años escribí El fauno en su atardecer para tratar de explicar lo que Debussy sentía ante su futuro próximo inmediato: el fin de su juventud y su encanto. 

Pero hablando de cosas mejores, el gran bailarín y coreógrafo ruso Vaslav Nijinsky había demostrado ser un excelente interprete con Giselle de Adolphe Adam, La Bella Durmiente de Piotr Ilyich Tchaikovsky, Sherezada de Nicolai Rimsky-Korsakov, Carnaval de Robert Schumann y su impresionante demostración con Petrushka de Igor Stravinksy en 1911, que al año siguiente -29MAY12- se aventuró a proponer una escenografía para la obra de Debussy, llamándola como el poema El atardecer de un fauno. La puesta en escena por el propio Nijinsky fue muy exitosa y controversial, pues mostraba escenas donde mímicamente se masturba ante el cuerpo de una ninfa. 

Este ballet le abrió las puertas a Nijinsky para proponer uno más a Debussy con la obra Juegos, CD 133 en 1913. Así mismo, Stravinsky le propuso ese mismo año el ballet para una de sus obras más famosas La consagración de la primavera, donde ahora el tema de polémica fue el sacrificio de una niña, sucitándose uno de los mayores escándalos del siglo XX (Camillé Saint-Saëns salió gritando al inicio de la función, una señora abofeteo a un señor que tuvo el "descaro"de aplaudir, hubo duelos al día siguiente del estreno entre personas que apoyaban y atacaban la obra y Stravinsky tuvo que "escapar" por la puerta trasera del teatro). Para 1916, Richard Strauss lo invitaría para crear el ballet Las alegres travesuras de Til Eulenspiegel. 

Tras tantos escándalos, El atardecer de un fauno sucumbió a pesar de su inicial éxito, por lo que su puesta en escena se fue apagando en la siguiente década. A principios de los 80’s fue reconstruido y en 1984, el grupo de rock británico Queen utilizó segmentos del ballet para el video de su pieza I want to break free, donde el propio Freddie Mercury interpreta al fauno. 

En 1977, Bruno Bozzetto realizó la película italiana llamada Allegro non troppo, la cual es una sátira para la obra de Disney, Fantasía. La primera de las piezas de la película es precisamente el Preludio al atardecer de un fauno, de donde se tomaron ideas del ballet y se siguió el poema de Mallarmé. 

La semana pasada -18OCT12-, la OSUANL presentó en MTY precisamente esta obra, como el mejor homenaje que se puede hacer a Debussy en su 150 aniversario.

Saludos.

Wednesday, October 17, 2012

150 años de Debussy: Traducción poética a la égloga El Atardecer de un Fauno


El Atardecer de un Fauno,
por Stephane Mallarmé


 
Le Faune:
Ces nymphes, je les veux perpétuer.
Si clair,
leur incarnat léger, qu'il voltige dans l'air
assoupi de sommeils touffus.
El fauno:
Esas ninfas, quiero perpetuarlas.
Tan clara,
su luz carmesí, flota en el aire
dormitando al pesado sueño.
Aimai-je un rêve?
mon doute, amas de nuit ancienne, s'achève
en maint rameau subtil, qui, demeuré les vrais
bois mêmes, prouve, hélas! que bien seul je m'offrais
pour triomphe la faute idéale de roses.
¿Quizá un sueño amaba?
Mi duda, agrupada en la ancestral noche, se acaba
en más de una sutil rama, que, muestra en realidad
a los bosques mismos, prueba, ¡ay! que bien me ofrecían
como triunfo al pecado ideal de las rosas.
Réfléchissons...
ou si les femmes dont tu gloses
figurent un souhait de tes sens fabuleux !
Faune, l'illusion s'échappe des yeux bleus
et froids, comme une source en pleurs, de la plus chaste:
mais, l'autre tout soupirs, dis-tu qu'elle contraste
comme brise du jour chaude dans ta toison?
que non ! par l'immobile et lasse pâmoison
suffoquant de chaleurs le matin frais s'il lutte,
ne murmure point d'eau que ne verse ma flûte
au bosquet arrosé d'accords ; et le seul vent
hors des deux tuyaux prompt à s'exhaler avant
qu'il disperse le son dans une pluie aride,
c'est, à l'horizon pas remué d'une ride
le visible et serein souffle artificiel
de l'inspiration, qui regagne le ciel.
Reflexionemos...
¡Oh, si en las mujeres que vacilas
incluyes el deseo de tus sentidos fabulosos!
Fauno, la ilusión se escapó de tus ojos azules
y fríos, como una fuente de llanto, de la más casta:
pero, la otra toda suspiros, dices tú que contrasta
¿como la brisa de un día cálido en tu vellón?
¡No! que por la inmóvil y cansada desazón
sofocaste el calor de la frescura matinal en tu lucha
sin el murmullo del agua que no paga mi flauta
una mojada arboleda de acuerdos; y el puro viento
excepto por los dos tubos prontos a exhalar su aliento
que dispersan el sonido en una lluvia árida,
está, en el horizonte que no agitó en el paseo
la visible y serena respiración artificial
de la inspiración, que se rinde ante el cielo.
O bords siciliens d'un calme marécage
qu'à l'envi de soleils ma vanité saccage
tacite sous les fleurs d'étincelles, Contez
"que je coupais ici les creux roseaux domptés
par le talent ; quand, sur l'or glauque de lointaines
verdures dédiant leur vigne à des fontaines,
ondoie une blancheur animale au repos:
et qu'au prélude lent où naissent les pipeaux
ce vol de cygnes, non ! de naïades se sauve
ou plonge..."
Oh sicilianas orillas de un tranquilo pantano
que es la envidia de soles de mi vanidad robada,
implícita bajo flores de centellas, díganle
"Que yo cortaba juncos domados
por el talento; cuando, bajo el marino oro de las lejanas
hierbas dedicaban su viña a sus fuentes,
ondeando una blancura animal en la siesta:
y que al preludio lento donde surge el gaitero,
es vuelo de cisnes, ¡no! náyades huyan
o sumérjanse..."
Inerte, tout brûle dans l'heure fauve
sans marquer par quel art ensemble détala
trop d'hymen souhaité de qui cherche le la:
alors m'éveillerai-je à la ferveur première,
droit et seul, sous un flot antique de lumière,
lys ! et l'un de vous tous pour l'ingénuité.
Inerte, todo quema en la leonina hora
sin marcar por aquel arte de atornillar
muchos hímenes anhelados de quien busca el objetivo:
entonces me erguiré firme al inicial fervor,
derecho y solo, bajo una antigua corriente de luz,
¡lirio! con una de todas ustedes por su ingenuidad.
Autre que ce doux rien par leur lèvre ébruité,
le baiser, qui tout bas des perfides assure,
mon sein, vierge de preuve, atteste une morsure
mystérieuse, due à quelque auguste dent;
mais, bast ! arcane tel élut pour confident
le jonc vaste et jumeau dont sous l'azur on joue:
qui, détournant à soi le trouble de la joue,
rêve, dans un solo long, que nous amusions
la beauté d'alentour par des confusions
fausses entre elle-même et notre chant crédule;
et de faire aussi haut que l'amour se module
évanouir du songe ordinaire de dos
ou de flanc pur suivis avec mes regards clos,
une sonore, vaine et monotone ligne.
Además de no ser dulce por filtrarse en sus labios,
el beso, que el mínimo de perfidias aseguran,
mi pecho, virgen probado, atestigua una mordedura
misteriosa, debido a algún augusto diente;
pero, ¡basta! tal arcano elegido por confidente
de vástago ancho y gemelo cuya virtud juega al azul:
que, desviando de sí la turbada mejilla
sueña, en un solo largo, que nos divierte
la belleza del entorno por las confusiones
falsas entre ella misma y nuestro canto crédulo;
y lograr la altura que el amor modula,
desvanecido en el ordinario sueño de la espalda
donde el puro flanco sigo con mis ojos cerrados,
una línea sonora, vana y monótona.
Tâche donc, instrument des fuites, ô maligne
syrinx, de refleurir aux lacs où tu m'attends !
moi, de ma rumeur fier, je vais parler longtemps
des déesses; et par d'idolâtres peintures
a leur ombre enlever encore des ceintures :
ainsi, quand des raisins j'ai sucé la clarté,
pour bannir un regret par ma feinte écarté,
rieur, j'élève au ciel d'été la grappe vide
et, soufflant dans ses peaux lumineuses, avide
d'ivresse, jusqu'au soir je regarde au travers.
¡Intenta entonces, instrumento de fugas, oh maligna
Siringa, florecer en el lago en que aguardas!
Yo, de mi orgullosa palabra, voy a hablar largo y tendido
de diosas; y, por idólatras pinturas,
a su sombra todavía hurtaré sus cinturas:
así, cuando a las uvas yo chupe la claridad,
para desterrar la pena por mi falsa brecha
interior, elevo al cielo este racimo vacío,
y, soplando en sus pieles luminosas, ansío
embriaguez, hasta que la noche me recuerda su camino.
O nymphes, regonflons des souvenirs divers.
"mon œil, trouant le joncs, dardait chaque encolure
immortelle, qui noie en l'onde sa brûlure
avec un cri de rage au ciel de la forêt;
et le splendide bain de cheveux disparaît
dans les clartés et les frissons, ô pierreries!
j'accours ; quand, à mes pieds, s'entrejoignent (meurtries
de la langueur goûtée à ce mal d'être deux)
des dormeuses parmi leurs seuls bras hasardeux;
je les ravis, sans les désenlacer, et vole
a ce massif, haï par l'ombrage frivole,
de roses tarissant tout parfum au soleil,
où notre ébat au jour consumé soit pareil."
je t'adore, courroux des vierges, ô délice
farouche du sacré fardeau nu qui se glisse
pour fuir ma lèvre en feu buvant, comme un éclair
tressaille! la frayeur secrète de la chair:
des pieds de l'inhumaine au cœur de la timide
qui délaisse à la fois une innocence, humide
de larmes folles ou de moins tristes vapeurs.
"mon crime, c'est d'avoir, gai de vaincre ces peurs
traîtresses, divisé la touffe échevelée
de baisers que les dieux gardaient si bien mêlée:
car, à peine j'allais cacher un rire ardent
sous les replis heureux d'une seule (gardant
par un doigt simple, afin que sa candeur de plume
se teignît à l'émoi de sa sœur qui s'allume,
la petite, naïve et ne rougissant pas:)
que de mes bras, défaits par de vagues trépas,
cette proie, à jamais ingrate se délivre
sans pitié du sanglot dont j'étais encore ivre."
Oh ninfas, unamos los recuerdos dispersos.
"Mis ojos, horadando los juncos, se lanzan a cada cuello
inmortal, que se ahoga en la onda quemadura
con un grito de rabia al cielo de la foresta;
y el espléndido baño de cabellos se desvanece
entre la claridad y los escalofríos ¡oh joyería!
Corro; cuando, a mis pies, alternan (moretones
de la languidez degustada a este mal de estos dos)
los durmientes entre su solitario abrazo peligroso;
me complace, sin desenlazarlas, y vuela
a este macizo, odiado por la sombra frívola,
de rosas secas de todo perfume al sol,
donde nuestra fiesta hoy consumida es tal."
Te adoro, coraje de vírgenes, oh delicia
feroz de sagrada carga desnuda que se deshoja
para huir de mi labio fogoso, ¡como un relámpago
vibrante! el miedo secreto de la carne;
pies de lo inhumano en el corazón del tímido
que abandona a la vez una inocencia, humedad
de locas lágrimas o de menos tristes vapores.
"Mi crimen, es tener, alegría de vencer estos temores
traicioneros, dividido la cabellera despeinada
de besos que los dioses guardaban muy mezclados:
porque, apenas ocultaba una sonrisa ardiente
bajo los pliegues de una sola (mantenido
por un simple dedo, para que su candidez de pluma
se tiñera a la fiel emoción de su hermana que se enciende,
la pequeña, ingenua y descarada):
ya de mis brazos, deshechos por vagas muertes,
esa presa, siempre ingrata, se entrega
sin piedad al sollozo del cual todavía estaba borracho".
Tant pis! vers le bonheur d'autres m'entraîneront
par leur tresse nouée aux cornes de mon front :
tu sais, ma passion, que, pourpre et déjà mûre,
chaque grenade éclate et d'abeilles murmure;
et notre sang, épris de qui le va saisir,
coule pour tout l'essaim éternel du désir.
A l'heure où ce bois d'or et de cendres se teinte
une fête s'exalte en la feuillée éteinte:
etna! c'est parmi toi visité de Vénus
sur ta lave posant tes talons ingénus,
quand tonne une somme triste ou s'épuise la flamme.
je tiens la reine!
¡Qué pena! A la felicidad de otros me arrastrarán
por las anudadas trenzas a los cuernos de mi frente:
tú sabes, mi pasión, que, púrpura y ya madura,
cada granada brota y de abejas murmura;
y nuestra sangre, enamorada de quien se va a aprovechar,
fluye por todo el enjambre eterno del deseo.
Al momento donde el bosque de oro y las cenizas descansan
una fiesta se exalta en las hojas murientes:
¡Etna! Es entre tu visita de Venus
bajo tu lava posando a tus ingenuos tacones,
cuando su tonelada se suma triste o se extingue la flama.
¡Yo tengo a la reina!
O sûr châtiment...
non, mais l'âme
de paroles vacante et ce corps alourdi
tard succombent au fier silence de midi:
sans plus il faut dormir en l'oubli du blasphème,
sur le sable altéré gisant et comme j'aime
ouvrir ma bouche à l'astre efficace des vins!
couple, adieu; je vais voir l'ombre que tu devins.
Oh seguro castigo...
no, pero el alma
vacante de palabras y este pesado cuerpo
tarde sucumben al orgulloso silencio de mediodía:
sin más que poder dormir en el olvido de la blasfemia,
sobre la yaciente y revuelta arena  y me encanta
¡abrir mi boca al eficaz astro de los vinos!
pareja, adiós; yo voy a ver la sombra de tus destinos.